Un colectivo conformado por investigadores y especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) presentaron ayer miércoles tres documentos que reúnen y exponen la situación de precariedad que ha sorteado el Instituto durante la actual administración, específicamente bajo las políticas de austeridad, implementadas por el gobierno federal y la reducción drástica de presupuesto provocada por la pandemia de Covid-19.
Uno de los documentos, Memorial de Agravios, enumera una serie de problemáticas que trabajadores del INAH han enfrentado en los últimos seis años, entre los que destacan falta de presupuesto para herramientas básicas de trabajo, deficiencias en la planeación y gestión de recursos para la operación del INAH y violaciones del marco normativo.
En el trabajo dos, Diagnostico Colectivo de Trabajadores del INAH, se documentan diferentes hechos de los últimos años, desde las irregularidades en el salvamento arqueológico del Tren Maya y las labores de reconstrucción por el sismo del 2017, hasta persecuciones a académicos que han levantado la voz y casos de hostigamiento y de acoso laboral.
El tercer documento presenta una serie de encuestas que los investigadores utilizaron para determinar las mayores deficiencias del INAH, mismas que fueron realizadas a diferentes trabajadores del Instituto en varios estados.
Presentan la realidad
En la presentación, el investigador Bolfy Cottom recalcó que los documentos no tienen la intención de solicitar más recursos o dinero para el Instituto, sino que presentan una realidad que no puede ser ignorada por la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, y por la siguiente secretaria de Cultura federal, Claudia Curiel de Icaza.
El antropólogo destacó que estos documentos, a los que llamó “documentos colegiados”, son fruto de una investigación aparte de las funciones principales de los participantes. “A pesar de todo, el INAH no ha dejado de funcionar”, señaló.
Por su parte, la investigadora Rosa María Venegas expuso que el colectivo realizó una encuesta a 364 trabajadores del INAH de diferentes partes del país, para conocer datos sobre las condiciones laborales en los centros de trabajo del Instituto, y presentó parte de esos resultados.
La investigadora agregó que los centros de trabajo no cuentan con instalaciones adecuadas para las labores diarias y señaló que padecen falta de mantenimiento. “Los espacios son insuficientes, carecen de servicios básicos: agua potable, telefonía, internet”.
Crisis severa
Edith Echauri Pérez, investigadora del Instituto, explicó que el Memorial de Agravios es un documento que reúne los atropellamientos y carencias que los trabajadores han percibido en los últimos años, mismas que ellos reportaron en las encuestas que realizó el colectivo.
“Para no ser reiterativa con la investigadora Venegas, algunos de los resultados son claros, tenemos hoy una crisis severa de desatención e inoperancia, así como de descoordinación administrativa. Esta situación es negada por las autoridades, hemos intentado sentarnos con ellos para resolver estos problemas, pero parece imposible porque niegan todo”, dijo.