El presidente Joe Biden regresó el martes a la campaña electoral por primera vez desde el intento de asesinato del expresidente Donald Trump, al continuar su llamado a calmar la retórica divisiva de ambos lados, pero también argumentando que hacerlo “no significa que debamos dejar de decir la verdad”, mientras arremetía contra su rival republicano.
Discurso
En su discurso en la convención de la NAACP en Las Vegas, Biden dijo que abordar la violencia política en el país debería significar frenar todo tipo de derramamiento de sangre, incluido un mejor combate a la brutalidad policial y la prohibición de armas como el rifle estilo AR utilizado en el ataque del fin de semana a Trump.
“Es hora de que haya una conversación importante en este país. Nuestra política se ha vuelto demasiado acalorada”, dijo Biden.
Arremete contra Trump
Eso no le impidió enumerar por qué la administración de Trump fue un “infierno” para los afroestadounidenses, incluido el mal manejo de la pandemia de coronavirus por parte del expresidente, el aumento vertiginoso del desempleo en medio de los primeros confinamientos y los intentos de, como dijo Biden, borrar la historia negra.
“El hecho de que debamos bajar la temperatura de nuestra política en lo que respecta a la violencia, no significa que debamos dejar de decir la verdad”, dijo Biden a la multitud que a menudo estallaba en cánticos de “¡Cuatro años más!”.