Nadie puede ni debe regatear el contundente triunfo de Claudia Sheinbaum en las urnas. Fue demoledor y, para muchos, totalmente inesperado.

Se presenció un tsunami complementado por los resultados en Ciudad de México, Yucatán, Veracruz, Morelos, Puebla; diversas alcaldías y, sobre todo, porque Morena y sus aliados habrían conseguido, prácticamente, contar con mayoría calificada en el Congreso de la Unión.

La candidata ganadora, empero, no recibió un cheque en blanco. Al gobierno se le vigila, no se le aplaude. Ciertamente se está ante una elección histórica por tratarse de la primera mujer que ocupará el cargo de Presidenta de la República y, también, por ser la persona que ha obtenido más votos para ese mandato en la historia de México.

Los ríos de gente que se observaron en las calles, haciendo largas filas para poder emitir su sufragio, no parecen corresponder al mediocre porcentaje de participación ciudadana, apenas superior al 60 por ciento del padrón electoral.

Imperdonable que, a estas alturas, tantos ciudadanos no entiendan que votar es un derecho, pero, también, una obligación constitucional. Se abstienen, pero se quejan. Exigen, pero no dan. Y, desde el confort de su sillón, afirman que “todos los políticos son iguales”.

Estos últimos años de la autodenominada “cuarta transformación” han sido un desastre, en todos sentidos. Pero pareciera que no suficientemente graves como para optar por la alternancia.

La mayoría de los mexicanos se sienten cómodos con esta forma de gobernar. Aprovechan que la sociedad está harta de los partidos tradicionales y ven en su movimiento “la esperanza de México”, aunque se trate de un mero reacomodo de la clase política.

El verdadero riesgo para el país es que, de continuar el afán autoritario y rencoroso que hasta ahora se ha visto, pero ya con los votos suficientes para reformar la Constitución, por la voluntad de una sola persona, no habrá leyes, instituciones, contrapesos, derechos o libertades que soporten esa aplanadora. Se espera que los legisladores sepan lo que van a hacer.