La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) llamó a las autoridades de Jalisco a preservar los indicios, datos de prueba, evidencias y todo aquel hallazgo que permita el esclarecimiento de los descubrimientos efectuados en el rancho Izaguirre, ubicado en el ejido La Estanzuela, perteneciente al municipio de Teuchitlán, Jalisco, ya que se pone en riesgo la investigación.
Ello, para garantizar la debida cadena de custodia que las autoridades están obligadas a cuidar, respetar y privilegiar acorde a lo previsto por Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición Cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas y por el Protocolo Homologado para la Búsqueda de Personas Desaparecidas y No Localizadas.
A través de un comunicado, señaló que peritos y visitadores de la CNDH observaron y documentaron el pasado jueves la presencia que hicieron en el lugar, organizaciones de sociedad civil, colectivos de madres buscadoras y medios de comunicación, quienes ingresaron al inmueble para conocer el interior del mismo, aun poniendo en riesgo la investigación.
Dijo que en ese lugar hubo un aproximado de 200 personas y 67 medios de comunicación, así como la presencia de personal de Fiscalía del Estado Jalisco (FEJ); la Comisión Local y Nacional de Búsqueda; la Comisión de Derechos Humanos de Jalisco; la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas local; la Fiscalía General de la República (FGR), y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que resguardó la zona perimetral.
Violación del protocolo
Sin embargo, agregó, los visitadores de la CNDH presentes en el sitio atestiguaron cómo se rompió el cerco de protección y protocolos básicos de resguardo ministerial establecidos, a cargo de la Fiscalía General de Jalisco, comprometiendo la investigación y la búsqueda mismas, por lo que se atendió y orientó a familiares de personas desaparecidas que se encontraban en ese inmueble.
“La CNDH expresa su preocupación por el manejo de información alarmista y confusa, que en nada abona al esclarecimiento de los hechos y peor aún, revictimiza a familiares de personas que eventualmente pudieron haber permanecido en el rancho. Empatizando completamente con el apremio de estos en la esperanza de saber de sus seres queridos.
“Consideramos que la participación de las y los familiares debe llevarse a cabo de acuerdo con los protocolos establecidos, como el Protocolo Homologado de Búsqueda, que establece las medidas necesarias para la participación de personas con legítimo interés en las investigaciones, para evitar que se vea afectada la garantía de los derechos al acceso a la justicia, verdad y transparencia del proceso”, añadió.