Por primera vez, el prestigioso Conservatorio Santa Cecilia, ubicado en Roma, Italia, aceptó a una chiapaneca, María Fernanda Arenas Marín, para formar parte de sus filas como violinista; pese a esta gran noticia, pide el apoyo de la ciudadanía, empresas y al Gobierno Estatal para poder apoyarla con sus gastos allá, debido a las limitaciones económicas que enfrenta.
Arenas Marín es alumna del noveno semestre de la Facultad de Música de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), de la licenciatura en música, con especialidad en Viola.
Hace unos meses tuvo la oportunidad de contactarse con el Conservatorio de Santa Celia, en Roma. Fue la profesora Kaethe Shoer quien la buscó y le pidió una audición a la chiapaneca; al verse sorprendida, ella abogó por la joven para que fuese aceptada y tuviera la oportunidad de estudiar en dicha escuela.
Arenas Marín también es integrante de la Orquesta Sinfónica infantil y juvenil de México (OSIM) por tres años consecutivos, así como en la Orquesta Juvenil Centroamericana y del Caribe (OJCA).
Actualmente participa en la Joven Orquesta Nacional de México (Jonmex) y representó al país en el Curso Internacional de Música de Vitoria-gasteiz en España.
La joven comentó que al ser la primer chiapaneca aceptada en el Conservatorio de Santa Cecilia, representa un sueño hecho realidad, también un gran privilegio el poder llevar el nombre de Chiapas a una institución de ese nivel.
“Me siento muy orgullosa de mis raíces y agradecida por todo el apoyo que he recibido de mi estado”, comentó.
Sin embargo, el dinero es ahora un impedimento importante, lo cual la ha limitado en poder ir a Italia, por lo que busca el apoyo de la ciudadanía para poder realizar su sueño y representar al estado.
“La facultad de música de la Unicach no cuenta con maestro de viola, eso hizo que yo buscara opciones para poder seguir creciendo musicalmente. Mi sueño es poder regresar en un futuro a mi país a transmitir a las nuevas generaciones de músicos todo lo que yo aprenda”, detalló.
Arenas Marín comentó que llegar a Italia significa entrar en un nivel de aprendizaje musical alto.
“Es como hacer un master. Estoy hablando con la embajada italiana para poder ver los procedimientos. No puedo creer que una maestra de ese nivel se haya fijado en mí.
“Tristemente, hay poca promoción de la cultura y por ende, no hay apoyo. He puesto corazón, tengo una beca en la Orquesta y una tienda de accesorios para instrumentos de cuerdas para poder sustentarme”, comentó.
La chiapaneca comentó que ha hecho cálculos y espera mantenerse de forma austera con 21 mil pesos al mes para pagar hospedaje, alimentación y transporte.
“Yo no puedo trabajar legalmente allá, porque tengo visa de estudiante, pero buscaré la forma de tener un ingreso extra. Es muy importante apoyar a la cultura, hay mucha gente haciendo buena música en Chiapas, pero no se apoya; si puedo lograr esto, es porque existen más personas talentosas que pueden lograrlo”, finalizó.
Arenas Marín mencionó que regresaría con todas las personas que la han apoyado para realizar conciertos y talleres, esto con el fin de que se pueda realizar su sueño de aprender más.para ayudar
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María Fernanda Arenas Marín
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