Familia pierde todo en un incendio; llaman a la solidaridad

La familia Arismendi perdió todo a causa de un incendio ocurrido el día lunes. Un patrimonio construido a lo largo de 20 años fue consumido por las llamas, por ello hacen un llamado a la solidaridad de los tuxtlecos para obtener ayuda y reponerse de esta tragedia.

A lo largo de 40 años, la señora Josefa Arismendi García y su esposo pusieron manos a la obra para trabajar, con esfuerzo ganas, y construir una casa. Ella trabajando como empleada doméstica, vendiendo pozol y tamales, fue como lograron construirla.

Lamentablemente, una inesperada tragedia les arrebató su patrimonio, sueños e historias que se habían forjado también al interior de esta humilde vivienda hecha de concreto, madera, lámina y materiales plásticos.

Doña Josefa, Chepita, como es conocida en su colonia, recordó con tristeza lo ocurrido.

Dio a conocer que el pasado lunes, alrededor de las 11 de la mañana fue llamada por su comadre para entregarle un apoyo en alimentos.

Casualmente ese día decidió acudir al llamado acompañada de su familia, ya que el lugar queda cerca de su vivienda localizada en la calle Río Portugal, entre Pichucalco y Lagartero número 1333, de la colonia Albania Alta de Tuxtla.

Recordó que no habían pasado ni cinco minutos de haber llegado a su destino cuando notó que salía humo negro en dirección a su domicilio, pero nunca imaginó que fuera en su vivienda.

“Antes de salir de la casa me di una vuelta, no noté algo fuera de lo común. Mi hijo y mi hermano que son discapacitados se adelantaron con mi nuera, después los alcancé”, precisó.

Momentos después llegaron a avisarle los vecinos apurados que su casa se estaba quemando; todo fue tan rápido que no les dio tiempo de sacar algo de la vivienda, todo quedó consumido por el fuego.

Atala Sánchez García, nuera de la señora Josefa, también comentó que el día de la tragedia intentó sacar algunas cosas o documentos, sin embargo, lamentablemente se cayó, golpeó en la cabeza y estuvo a punto de perder la vida calcinada.

“Nos avisaron que todo fue por un corto que hizo en la mufa, cayó en la parte de la lona y de ahí todo se prendió porque era de madera. Quizá hubiéramos muerto pero ese día nos llamaron para darnos un apoyo, eso nos salvó la vida”, comentó.

El incendio le arrebató lo que tenía: una televisión, ropa, muebles, pero lo más importante era un dinero que tenía guardado dentro de un ropero, así como documentos que le había dejado su padre por un tema legal de herencia familiar.

“Esos documentos me iban a servir porque tenemos una disputa familiar; mi padre había dejado en orden ese tema y yo tenía esos papeles, pero todo se quemó, intenté sacarlos y por poco pierdo la vida”, lamentó.

Las llamas consumieron todo el patrimonio, así como los documentos; el siniestro fue tan fuerte que desprendió partes del repello de la losa, de las paredes y otras partes de la vivienda.

Con mucho esfuerzo habían logrado comprar algunas cosas de gran utilidad como lavadora, refrigerador, estufa, no obstante todo se perdió.

Lamentablemente, además de las carencias económicas que padece la familia, dos de los integrantes padecen de sus facultades mentales, lo que les imposibilita realizar algún tipo de labor o trabajo.

Maurilio del Carpio Arismendi y Neri del Carpio García, hijo y hermano de la señora Josefa, son los integrantes de la familia que también requieren de un apoyo oficial, el cual ya fue solicitado pero hasta el momento no ha llegado.

Doña Chepita, expuso que al notar que el incendio era demasiado fuerte, se resignó, salió de su casa y con impotencia vio cómo su patrimonio era consumido por el fuego, asegurando que lo más valioso es preservar la vida.

“Me dio tanta tristeza que estuve a punto de perder el conocimiento, ya no quise seguir viendo. A los pocos minutos todo había pasado, la gente se juntó, trató de ayudar pero nada pudieron hacer”, expresó.

Después de la tragedia ha vivido del apoyo de la gente, de los vecinos, pero se requiere más ayuda, por ello la familia Arismendi pidió el apoyo de los tuxtlecos, la solidaridad para sobreponerse, poder reconstruir su vivienda y comenzar de nuevo.

A las personas de buen corazón que deseen aportar pueden dirigirse al citado domicilio, o marcar al número 961 326 22 50, con Elizabeth Montero. También pueden depositar a la cuenta de Banamex 4766 8703 2812 6893.

para ayudar

Pueden aportar directamente en el domicilio de Doña Josefa, o marcar al número 961 326 22 50, con Elizabeth Montero. También pueden depositar a la cuenta de Banamex 4766 8703 2812 6893.