Familiares de Héctor Javier Gurgúa De La Rosa, de 46 años de edad, quien laboró por 25 años como conductor de un taxi, piden el apoyo de la ciudadanía ya que derivado de su labor y tras resultar con diabetes desarrolló insuficiencia renal y ahora, requiere de hemodiálisis para salvar su vida.
Greysi Paola Gurgúa Domínguez, hija de Javier, dio a conocer que su padre sufre de los riñones desde hace cinco años, sin embargo, en los últimos meses la situación ha empeorado ya que pasó a la etapa cinco.
Por ello, requiere de una tratamiento de hemodiálisis tres veces por semana, lo que les cuesta mil 200 cada una, es decir, tienen un gasto de tres mil 600 semanales, lo que representa un fuerte gasto para Greysi, quien corre con los gastos clínicos.
Señala que está haciendo todo lo posible por salvar la vida de su padre, lamentablemente por la pandemia del Covid-19, no ha tenido mucha suerte con la venta de sus productos en la calle.
“Soy vendedora informal, me dedico a la venta de frutas de temporada, en las calles del centro, salgo a ofrecer fruta ya preparada, mangos, piñas, pero en estos momentos no hay ventas, la gente no quiere comprar y menos en la calle”, indicó.
Don Héctor recibe las sesiones en la Clínica Particular Sión, localizada en la colonia Magisterial, ya que el Seguro Popular ya no tiene vigencia, además de que no cubren tratamientos de este tipo, “tampoco contamos con Issste o IMSS, que es donde ofrecen este tratamiento”.
Recordó que su padre dedicó toda una vida a la movilidad de los tuxtlecos mediante el servicio de taxi, sin embargo, no esperaba que le trajera estas graves consecuencias a su salud, “no pedimos que me lo den a mí, el apoyo es para mi padre, un hombre que ha sido muy trabajador, pobre pero honrado para sacarnos adelante, ahora nos toca apoyarlo pero no sabemos cómo, el trabajo está muy bajo”.
Greysi comentó que el estado de salud de su padre puede ser corroborado en la misma clínica de hemodiálisis Sión. Desde hace tres meses su estado es delicado, este tratamiento debe realizarse ya que de lo contrario su sangre puede contaminarse y su vida estaría en grave riesgo.
Además de este tratamiento, requiere de unas vacunas especiales, una malteada, dextrevit y cumplir con la receta semanal.
“De medicamentos se gasta cerca de mil 500 pesos semanales más las sesiones, más los análisis y todo este gasto corre por nuestra cuenta. Mi padre padece de esto por la necesidad de apoyar a su madre y luego a nosotros a salir adelante”, expresó.
Por ello, hace un llamado a la población, a las instituciones para que le tiendan la mano con una aportación económica o cubrir las sesiones de hemodiálisis o parte de ellas, para que pueda mantener su estado de salud estable.
Para recibir cualquier tipo de aportación pone a disposición el siguiente número telefónico: 961 254 35 24 o en la siguiente dirección: 12 Oriente, entre 13 y 14 Sur.
En este contexto, dio a conocer que solicitó ayuda a las autoridades municipales para su padre, no obstante, le dijeron que saldría un apoyo dentro de un año y este tratamiento no puede esperar tanto tiempo.
“Estamos en espera de que el día lunes el DIF nos pueda dar una respuesta positiva. No se nos hace justo que a las personas que hemos sido honestas en nuestro caminar, tengamos que pasar por estas situaciones, tocar puertas sin obtener respuesta alguna”, indicó.
Sin pensión alguna, sin otro tipo de apoyo, Greysi pide apoyo para su padre, pero también para las personas humildes que se encuentran en esta lamentablemente situación de precariedad económica y de salud, por ello acude a la población en estos momento difíciles.
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