Tras la lamentable noticia del pasado 13 febrero sobre la muerte de tres menores tsotsiles de la comunidad San Cayetano, municipio de El Bosque, por comer pan envenenado, se precisó que la causa fue por inhalación de insecticida, esto tras los resultados de la necropsia practicada.
Información dada a conocer por el fiscal del Estado, Jorge Luis Llaven Abarca, los niños no consumieron pan que se encontraba tirado en varias partes de la comunidad como parte de un programa para disminuir la población de perros y gatos.
Fallecieron por intoxicación de un pesticida inoloro como causa del fallecimiento, reveló.
Durante la necropsia se pudo comprobar que los niños no tenían alimentos en la tráquea ni en el esófago.
Se desconoce dónde inhalaron el pesticida, si en la calle o en el trayecto cuando se dirigían a una tienda a comprar caramelos, se dijo.
Agregó el fiscal que terminaron la necropsia y, efectivamente, “la causa de la muerte fue falla orgánica múltiple secundaria. Vale la pena aclarar que fue por intoxicación por inhalación de insecticida. Es decir, ya hicimos pruebas patológicas, porque cuando se hizo la necropsia no se encontraron residuos de comida en el esófago y estómago de los menores”.
En un principio se informó que eran todas niñas, sin embargo, se aclaró que era dos varones y una fémina, de 8, 6 y 2 años de edad.
Además, en las diligencias del Ministerio Público (MP) encontraron varios botes con residuos químicos que son usados para el control de plagas en las áreas de cultivo de maíz.
Por el fallecimiento de los menores, la Policía Estatal detuvo a las autoridades comunitarias identificadas como Martín y Bartolo, pero quedaron en libertad bajo reservas de ley, pero el MP continúa con las investigaciones.
Los niños son originarios del municipio de Chenalhó, pero habían llegado a San Cayetano, municipio de El Bosque, a visitar a familiares.