Dos presuntos delincuentes fueron detenidos por habitantes de la colonia Rivera Maya, al oriente de Tapachula, que amenazaban con lincharlos, amarrándolos a un poste y ya les habían rociado gasolina.
Se trata del hondureño Óscar Danilo Sosa Recinos, de 24 años y el mexicano David Liévano Ruiz, de 23, quienes habían ingresado a la casa de Luis Ángel Hernández Reyes, de donde habían sacado una carretilla, una bomba fumigadora y un cilindro de gas.
Al percatarse de ello, los vecinos detuvieron a la pareja de delincuentes y la amarraron a un poste del alumbrado público con lazos.
Luego amenazaron con lincharlos, prendiéndoles fuego, incluso les rociaron gasolina.
Elementos de las distintas corporaciones policíacas acudieron al lugar y dialogaron con los vecinos, convenciéndolos para que los entregaran y las cosas no pasaran a mayores.
Los dos sujetos salvaron la vida pero fueron puestos a disposición del Ministerio Público acusados de robo y lo que les resulte, aunque los habitantes de esa comunidad advirtieron que si los encuentran en la calle nuevamente, se harán justicia por propia mano.
Y es que los robos a casas habitación en colonias de la periferia de Tapachula se han incrementado en forma considerable en los últimos días del año, debido presuntamente a la falta de vigilancia policíaca.
La Policía Municipal pretendió rescatarlos en primera instancia; sin embargo, los colonos se negaron a entregarlos, aduciendo complicidad e incapacidad del secretario Julio Enrique Balbuena Ruiz, por lo que tuvieron que intervenir otros representantes de instituciones de seguridad como la Estatal Preventiva, Policía Especializada, Ejército Mexicano.
Finalmente, tras un acuerdo firmado, los dos ladrones fueron subidos a las patrullas para ser puestos a disposición de la Procuraduría General de Justicia, además de manera interna, en la colonia firmaron de acuerdo que los ladrones y sus familias serán expulsados de la colonia Rivera Maya.