Se estima que dentro de los próximos diez años 100 millones de personas en el mundo pasarán a la pobreza, y si continúa la tendencia en la explotación de recursos naturales, para el año 2030 al menos 720 millones de personas serán movilizadas por problemas de agua potable.
Lo anterior, lo dio a conocer José Antonio Quesada Palacios, vicepresidente de Política Regulatoria de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Dijo que el Banco de México (Banxico) considera que es muy importante valorar la naturaleza y dimensión de algunos desafíos financieros que han venido ganando relevancia, como son los temas de sustentabilidad ambiental y ecológica.
Dichos temas no sólo son cruciales para la sostenibilidad y el desarrollo global, sino que pueden propiciar riesgos de crédito con consecuencias sistémicas.
Al respecto, indicó que la Red Bancos Centrales y Supervisores para Enverdecer el Sistema Financiero, de la que el Banxico es miembro fundador, ha identificado los riesgos financieros sistémicos que implican determinados temas ambientales y climáticos, y busca incorporarlos en las decisiones estratégicas de todas las instituciones financieras desarrollando metodologías para medirlos y administrarlos.
El riesgo climático es algo que existe y que en el sistema financiero se está tratando de trabajar para incorporarlo como parte del análisis de riesgos. Ya se tiene el caso de la primera empresa que quebró por riesgo climático, en Los Ángeles, Estados Unidos, una eléctrica por motivo de los incendios.
“Cada vez se tienen riesgos más fuertes que están impactando a los negocios y si no se incorpora dentro del análisis de riesgo esta nueva variable, potencialmente podríamos tener problemas de impacto”.
Quesada Palacios, dijo que esto representa la oportunidad de llevar dinero aquellas organizaciones, instituciones y negocios que tengan la posibilidad de generar esquemas sustentables.
Agregó que el sistema financiero está en una posición estratégica para hacer llegar estos recursos hacia aquellos proyectos que ayuden a lograr objetivos a favor del medio ambiente.
En ese sentido, dijo que las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofomes), son importantes para lograr este objetivo, porque están muy cerca de aquellas empresas que no necesariamente tienen acceso a sistemas financieros más complicados. Para ello trabajan de cerca con la Asociación Nacional de Sofomes.