La Red para la Conservación y Divulgación de los Reptiles Venenosos en Chiapas conmemoró el Día Internacional de la Toxicología, con el fin de reflexionar acerca de su importancia para salvar vidas.
La toxicología es la ciencia que estudia los efectos nocivos causados en la salud de los organismos vivos, mediante la exposición a agentes químicos, físicos o biológicos tóxicos. Ante ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) convocó a reconocer la importancia de la disciplina.
“No olvides que en el mundo, día con día, hay expertos salvando vidas gracias al conocimiento de esta materia. Algunas especies animales, como serpientes, arácnidos, medusas, orugas, etc., son causantes de intoxicaciones, mediante sustancias biológicas que conocemos como venenos”, externó la Red.
Segundo coloquio
La misma Red anunció la realización del “2.º Coloquio de animales venenosos y manejo de intoxicaciones” para este 2024.
“Las intoxicaciones por animales venenosos son producidas por la exposición (mordedura, picadura o contacto) a especies capaces de inocular sus toxinas. Provocan una serie de alteraciones fisiopatológicas que son primordiales diagnosticar para el tratamiento correcto del paciente intoxicado”, destacó la organización paralela al anuncio.
El primer coloquio se realizó desde Comitán de Domínguez, con el apoyo de la Redtox Chiapas y la productora de las soluciones ante las intoxicaciones, Antivenenos.
¿Cómo se produce el veneno?
La Red ha reiterado que los venenos producidos por los animales capaces de generar estás sustancias contienen una gran cantidad de enzimas, toxinas y proteínas. Es por ello que ningún veneno es igual en su composición bioquímica, por ende, la actividad de estos puede ser similar a la de otros, pero no significa que se derive de los mismos compuestos.
Lo anterior es la razón por la cual existen varios tipos de antivenenos específicos para el tratamiento de intoxicaciones, cada uno para cierto grupo de animales.
Hoy, la tecnología ha permitido también la creación de antivenenos polivalentes, que se utilizan para grupos amplios de animales, como el Antivipmyn, que es útil para el tratamiento de envenenamientos causados por nauyacas, cantiles y cascabeles, “todos ellos pertenecientes al grupo de víboras de foseta”, especificó el grupo.