Inami intentará contener caravana de migrantes

La vigilancia fue fortalecida en la frontera sur del país para tratar de contener el ingreso irregular a territorio nacional de la primera caravana de migrantes procedentes de Centroamérica en este año, la cual ya empezó a concentrarse en la población guatemalteca de Tecún Umán.

En el puerto fronterizo de Ciudad Hidalgo el comisionado del Instituto Nacional de Migración (Inami), Francisco Garduño, recibió un informe “sin novedad” hasta el momento de la nueva caravana y dio el banderazo de salida a decenas de elementos migratorios y de la Guardia Nacional que trabajarán en los operativos.

En las márgenes del río Suchiate los agentes solicitan documentos a todas las personas que están ingresando por las balsas o caminando y quien no los presenta de inmediato le solicitan que regrese, caso contrario pueden ser detenidos y deportados.

A su vez algunos centroamericanos han llegado hasta el puente internacional Rodolfo Robles y decidieron entregarse a las autoridades mexicanas que ofrecen alternativas de regularización e iniciar un proceso de refugio.

El comisionado migratorio afirmó que se hará cumplir la ley y se garantizará la tranquilidad en la zona, advirtiendo que quien ingrese tiene que cubrir una serie de requisitos y esperar los términos que establecen los reglamentos legales.

Afirmó que el Gobierno Federal cuenta con la capacidad para atender la contingencia derivada de la caravana, incluso si quienes participan en esta deciden ingresar por diversos puntos de la frontera entre México y Guatemala.

Un recorrido por el río Suchiate permite apreciar que ha sido reforzada la presencia de elementos de la Guardia Nacional y del Inami, quienes solamente atienden el caso de las personas que entran a territorio mexicano, mas no así lo relacionado con el contrabando de mercancías de un lado a otro de la frontera que sigue en forma normal.

Sobre el puente internacional se han formado algunos grupos de migrantes hondureños que esperan que les otorguen el permiso para ingresar a México, pero la mayoría señala que su finalidad es llegar hasta los Estados Unidos.

Iglesia pide al gobierno postura

La Diócesis de Tapachula pidió al Gobierno Federal una postura definida en torno a la nueva caravana de migrantes que podría ingresar por la frontera sur; mientras tanto, anunció que apoyará a quienes ingresen al territorio mexicano y solicitó a la feligresía que otorguen ayuda y eviten las acciones de xenofobia, rechazo y desprecio.

El obispo Jaime Calderón Calderón exhortó a las autoridades federales, estatales y municipales a definir un programa de atención integral y a la sociedad a “tratar a los centroamericanos como quisiéramos que trataran a nuestros paisanos irregulares en Estados Unidos”.

Dijo que la Comisión de Emergencia de la Diócesis y los Vicarios Foráneos se están preparando para asistirlos en su paso por el territorio diocesano.

“Dios nuestro padre que nos ama y nos invita a caminar juntos en las alegrías y en las tristezas, en los tiempos de tranquilidad y en los de alta exigencia, acompañe nuestro camino eclesial y nuestra alta disposición en el ejercicio de la caridad para socorrer a quienes menos pueden”, sostuvo.

La caravana partió de Honduras y tiene la intención de llegar a los Estados Unidos, aunque la postura del gobierno mexicano “es ambigua y titubeante”.

Aclaró: “No sabemos si los hermanos que vienen en la caravana podrán cruzar la frontera, llegar hasta Tapachula o incluso seguir más allá de nuestro estado, atravesando nuestro territorio diocesano”.

Instancias preparadas

El titular de la Secretaría de Protección Civil del Estado, Luis Manuel García Moreno, dijo que todas las instancias que forman parte del Sistema Estatal de Protección Civil ya están preparadas para el posible arribo de la primera caravana migrante del año, proveniente de países centroamericanos, en su mayoría de Honduras.

“Ya existe un protocolo para que de manera humanitaria se brinde ayuda a través de la Secretaría de Salud, el DIF estatal y organismos internacionales, a esta población, sobre todo a niños que viajan solos.

También se tienen insumos necesarios para atender primero a la población chiapaneca, como es el caso de los grupos desplazados, y posteriormente a todas las personas que ingresen a Chiapas”, comentó.

Detalló que el fenómeno migratorio es un tema internacional que compete a todas las autoridades y principalmente del índole federal, específicamente el Instituto Nacional de Migración.

Recientemente la secretaria de gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo que no entregará visas de tránsito ni salvoconductos a los más de tres mil integrantes de la caravana migrante que busca llegar a Estados Unidos, esto según diversos medios de comunicación.

Afirmó que habrá operativos especiales, lo que se confirmó el jueves con el despliegue de la Guardia Nacional en diversos puntos de la Frontera Sur, como en el río Suchiate.

Por otra parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador indicó en una de sus conferencias mañaneras que hay por lo menos cuatro mil empleos disponibles en la frontera Sur, dentro del programa Sembrando Vida.

Al respecto, el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Carlos Orantes Vázquez, manifestó que los gobiernos de todos los países deben poner mayor orden en sus territorios.

Sin pago, migrantes barrenderos

Migrantes de diversas nacionalidades que participan en el Programa de Emergencia Social, instrumentado por el Gobierno Federal, exigieron el pago de sus salarios que les adeudan desde el mes de diciembre.

Son dos quincenas que les deben hasta ahora y no han encontrado respuesta de las autoridades, por lo que realizaron una manifestación en las oficinas municipales en donde se les contrata para realizar labores de limpieza en las calles de la ciudad de Tapachula como barrenderos.

Uno de los manifestantes originario de Haití, explicó que la petición es que las autoridades les paguen las dos quincenas que les deben “por levantar basura y limpiar las calles de la ciudad”.

Algunos con sus hijos en brazos mencionaron que el dinero les sirve para poder alimentarse y pagar renta, en tanto se determina su situación de estancia legal, toda vez que su objetivo era llegar a los Estados Unidos y no quedarse en la frontera sur mexicana.

Señalaron que los han amenazado con entregarlos al Instituto Nacional de Migración si continúan exigiendo el pago de sus salarios, cuando se trata de un dinero que ya ganaron con su trabajo.

Son unos 300 los que participan en Tapachula en ese programa, quienes ganan 170 pesos diarios por realizar acciones de limpieza en las calles de la ciudad, pero “no recibimos el pago desde diciembre pasado”.