Derivado del confinamiento domiciliario recomendado por las autoridades sanitarias ante la pandemia del Covid-19, se espera un aumento de embarazos no deseados y un pico en la taza de maternidad, ya que la actividad sexual no disminuye.
Sin embargo, hay riesgos que no deben olvidarse, toda vez que el coronavirus y otras infecciones sexuales van de la mano, manifestó Alejandro Rivera Marroquín, coordinador estatal del Programa VIH/Sida de la Secretaría de Salud.
Señaló que algunas prácticas sexuales, como tener sexo ocasional o los llamados “amigos con derechos”, son un riesgo durante la actual crisis sanitaria, tanto por el Covid-19 como por la pandemia que sigue vigente en todo el mundo desde hace 40 años, que es la del VIH.
Mencionó que de acuerdo al ONUSIDA, más de 70 países en el mundo han estado en riesgo de presentar desabasto de medicamentos antirretrovirales (para el VIH) por la emergencia sanitaria. Afortunadamente en México y Chiapas este contexto no se replica.
Destacó que en el estado lograron establecer una estrategia que permitió dar la continuidad en el acceso al tratamiento antirretroviral, como una actividad esencial en los servicios para el diagnóstico y atención del VIH.
Durante este periodo han identificado en una evaluación preliminar un incremento de personas que buscan hacerse una prueba de diagnóstico de VIH, lo que ha arrojado alrededor de 100 nuevos positivos, quienes iniciaron el tratamiento de forma inmediata.
También han identificado que alrededor de 200 pacientes que en algún momento abandonaron los servicios de salud regresaron para buscar la continuidad de su tratamiento, ya que este permite fortalecer el sistema inmunológico ante un posible contagio de coronavirus.
En general, indicó que a la fecha alrededor de cinco mil 600 personas con VIH en Chiapas se encuentran en atención y tratamiento antirretroviral, a través de las 15 clínicas de atención que están distribuidas en todo el estado.
De todos ellos, destacó que el 90 por ciento se encuentran indetectables, lo que significa que tienen un buen control virológico como resultado de la adherencia al tratamiento.
Rivera Marroquín dijo que se ha identificado otros retos importantes como el resurgimiento de la sífilis, una alta incidencia de otras enfermedades de transmisión sexual como la clamidia y gonorrea, documentada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Esta situación se vuelve más compleja, porque se dificulta que algunas personas puedan acceder a servicios de salud sexual, o bien que dejen de atender sus tratamientos para evitar propagar otras enfermedades sexuales, tal es el caso de la sífilis.
Por esta razón, todas las medidas que implica la prevención del contagio del coronavirus durante la pandemia deben incorporar el cuidado de la salud sexual y reproductiva.
Científicos de algunos países señalan que el Covid-19 puede ser transmitido a través de fluidos humanos, como la saliva o el semen, e incluso de que pueda alojarse en el tracto intestinal y depositarse en las heces, mismas vías en las que también se transmiten otras infecciones de transmisión sexual; aunque la información aún no es precisa, los cuidados sexuales deben ser prioridad.