En un segundo video publicado en la página de Facebook de la Secretaría de Desarrollo Urbano Municipal, la titular del departamento, Claudia Baca Esquinca, y la arquitecta María José González Portillo, quien encabeza el proyecto de restauración del Museo de la Ciudad, hablaron sobre el proceso que se seguirá para rehabilitar el inmueble.
María José González expuso que ya concluyeron las últimas observaciones que le hicieron a su proyecto de intervención, por lo que esperan que no haya más correcciones de las dependencias que se encargan de proteger el patrimonio, y así contar con los permisos pertinentes para iniciar las labores.
Claudia Baca cuestionó a González sobre cuáles fueron las dificultades que enfrentó al crear el proyecto, sobre todo cuando se trata de intervenir un edificio que no tiene la protección de patrimonio; y en qué momento se empieza a trabajar de forma diferente cuando ya se considera como tal, como en el caso del recinto, que a partir del año pasado pudo ser parte de los monumentos que integran la lista del patrimonio arquitectónico de la ciudad.
La experta indicó que existen varias denominaciones en el concepto de patrimonio. “Estamos hablando de que el antiguo palacio (Museo de la Ciudad) es patrimonio artístico, y en la legislación que existe en la República Mexicana y en el estado, vemos que hay dos organismos que rigen el patrimonio: el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que resguarda el patrimonio construido antes de 1900; y el Inbal, que es el que cataloga el patrimonio artístico”, detalló.
Continuando con la respuesta, la arquitecta mencionó que la restauración que encabeza no tiene que ver con la actividad que se realiza o se vaya realizar en el futuro dentro del inmueble sino que se enfoca en el patrimonio tangible; es decir, la construcción. Añadió que un proyecto de este tipo es muy diferente a cuando se construye una obra arquitectónica convencional, porque en este caso se trata de un edificio que lleva años construido y que tiene una gran historia.
Al detallar cómo inició el proyecto, dijo que empezaron por documentarse a través de archivos para saber por qué el edificio tiene tal forma, y luego iniciaron un levantamiento milimétrico de todos los espacios y elementos del inmueble para encontrar dónde están los daños. “O sea que hay un levantamiento de plano normal y uno de deterioro, para poder discernir cuál será el proyecto de intervención que se necesita para recuperar las partes dañadas”, explicó.
Asimismo, en el video explica que los procesos para restaurar el patrimonio llevan mucho tiempo porque tienen que pasar por varias manos para liberar el recurso y las licencias. Baca Esquinca espera que esta semana puedan tener los permisos en su poder para iniciar el trabajo, pues la licencia expedida por el Inbal ya está autorizada, aunque todavía esperan la liberación de la expedida por el INAH, indicó.