Los amigos no siembre son buenos consejeros y Joaquín Cosío es ejemplo de ellos, pues si les hubiera hecho caso, jamás habría sido “Mascarita”.

En la misma semana que recibió la invitación, le llegó otra de la producción Zapata, dirigida por el nominado al Óscar, Alfonso Arau, y protagonizada por Alejandro Fernández. Y también de otra llamada Barbacoa de chivo, donde sería comandado por Carlos Carrera (El crimen del padre Amaro),

“Llevaba varias semanas sin recibir respuesta de varios casting que había hecho y de pronto me llegaron los tres”, recuerda Cosío. “Y a pesar de que mis amigos, a los que consulté, me decían que no tenía demasiado que pensar, que la apuesta era ‘Zapata por ser una gran producción y no hacer caso a unos jóvenes que nadie conocía, me gustó el personaje de ‘Mascarita’, la historia, y creo que no me equivoqué”, recuerda.

Aún hoy, la gente lo llama por el nombre de ese personaje. Lo invitan ocasionalmente a comer o el pasaje del micro. “Mascarita vive”, señala.