Mito, realidad y Chikungunya

Conforme ha ido expandiéndose la enfermedad Chikungunya han ido expandiéndose también varios mitos y realidades sobre ese mal. Es decir, hay múltiples versiones respecto a una supuesta diversidad de síntomas y secuelas posteriores a ella que, además, también varían de una persona a otra.

Existen dudas, respecto de que si se transmite de persona a persona y no solamente por el piquete de un mosquito, como dicen las autoridades correspondientes, que si tomar vitamina B inhibe o previene su contagio, que si una vez recuperado un paciente no debe ingerir alcohol porque recaerá en la misma enfermedad, que si hay que tomar hoja de mango hervida, a manera de té, que si el olor de la pimienta ahuyenta al mosco, etcétera, etcétera, etcétera.

La verdad, me comentó un amigo médico, ni siquiera los epidemiólogos saben bien a bien cuáles son las consecuencias exactas de la enfermedad y tampoco están ciertos si esas consecuencias son fijas o varían de un paciente a otro.

Versiones extraoficiales cuentan que el virus está mutando en algunos casos, que sus síntomas son más severos en algunas personas y menos en otras, que aparentemente ataca con mayor dureza a quienes son diabéticos o hipertensos, en algunos casos, o que una madre puede transmitir el mal al producto neonatal que lleva en el vientre.

Nada de eso está totalmente comprobado. La medicina es una ciencia y, por tanto, todo lo que ella haga entre los seres humanos tiene que haber sido antes comprobado y verificado científicamente.  

Los científicos de la medicina están experimentando todavía cuál es realmente el comportamiento de ese virus, me confió el galeno.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, OMS, la fiebre Chikungunya es una enfermedad viral transmitida al ser humano por la picadura de mosquitos infectados de tipo Aedes aegypti, que también puede transmitir el dengue y la fiebre amarilla.

Es un mosco presente, especialmente, en zonas tropicales y subtropicales. Y también puede ser contagiado por el Aedes albopictus que sobrevive en áreas más templadas.

Esos insectos obtienen el virus cuando ingieren sangre infectada y sirven como medio de transporte de esta enfermedad hacia otros seres humanos. 

Hasta ahora, hay algunas características observadas en los enfermos de Chikungunya: dependiendo de factores propios de sus sistemas de inmunidad, entre el 10 y el 15 por ciento de los pacientes pueden presentar una fase crónica grave de la enfermedad, es decir, dolores articulares severos y puede llegar incluso a presentarse destrucción de las articulaciones con invalidez para los movimientos.

De igual manera, a esos síntomas han de sumarse afecciones como fatiga y depresión que pueden permanecer, en algunos casos, durante tres meses o más, dependiendo del daño articular.

Las recomendaciones son simples: una de las formas más eficaces de evitar la enfermedad es prevenir la picadura del mosquito y para ello hay que utilizar prendas de vestir claras que no atraen a los insectos, así como usar mangas largas en camisas y pantalones, y aplicar repelentes contra insectos sobre la piel expuesta.

Especialistas de la ONU han dicho que el control de los mosquitos es un método fundamental para evitar la propagación del mal pero para ello se requiere un plan integral de prevención que incluye acciones en educación, salud y medio ambiente.

Resulta vital eliminar o destruir los criaderos del mosquito a mediano plazo y la prevención de las picaduras en los sitios donde ya se encuentra el insecto, a través del uso de repelentes. También las campañas educativas a la población acerca de los riesgos que implican los mosquitos y las precauciones domésticas para su control, forman parte de esta estrategia de prevención.

Cuentan que la Vitamina B1 es usualmente recomendada en las droguerías como un remedio eficaz que consumido con 15 días de anticipación a la exposición, evita la picadura de mosquito transmisor del Chikungunya.

Como primera línea de defensa para evitar las picaduras, especialistas recomiendan el uso sobre la piel de todo el cuerpo, de un repelente fácil de utilizar, seguro y con efectividad demostrada contra el mosquito transmisor.

El virus es transmitido únicamente por la picadura del mosquito infectado. No se transmite por abrazos, besos, por los alimentos o por el aire que respiramos.

No se transmite de persona a persona. Así que si dos personas cercanas adquieren la enfermedad es porque fueron picadas las dos por mosquitos infectados.

Para impedir la infección de otras personas en la vivienda, la comunidad o el hospital, debe procurarse que el enfermo en fase aguda de la enfermedad no sea picado por mosquitos.

Aunque se han hecho algunos intentos en este sentido, aún no se ha desarrollado una vacuna efectiva contra el virus. La mayoría de los pacientes mejoran a los 10 días de iniciado el mal, sin embargo, algunos de ellos pueden sufrir recaídas con síntomas de dolores reumáticos. También pueden presentar alteraciones de vasos sanguíneos de la piel así como síntomas depresivos, fatiga y debilidad. Estas recaídas se pueden dar incluso varios meses después de contraída la dolencia.

No está probado que deje secuelas permanentes, sin embargo ha habido casos de enfermos cuyos dolores articulares persisten por meses o años después de la infección e incluso algunos han presentado destrucción de articulaciones.

Otras secuelas menos frecuentes incluyen complicaciones oculares, neurológicas, cardiacas, y molestias gastrointestinales.

El Chikungunya por sí solo no causa la muerte y si eso llegara a suceder en un paciente será casi siempre como consecuencia de otros problemas de salud previos en el enfermo. Así que no hay que creer del todo lo que ha estado corriendo como leyenda de boca en boca. Hay que ir a un médico, rápido, cuando haya sospechas de ese mal.

alexmoguels@hotmail.com