La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el asesinato del sacerdote Marcelo Pérez Pérez, defensor de derechos humanos y beneficiario de medidas cautelares por la CIDH, que ocurrió en San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
El organismo internacional destacó que el padre Marcelo Pérez era beneficiario de medidas cautelares desde el 2015 dada su situación de riesgo. En su Resolución 30/2015, la Comisión solicitó al Estado mexicano, entre otros aspectos, adoptar las medidas necesarias para garantizar su vida, su integridad personal, y la posibilidad de realizar su labor de defensa libre de actos de violencia y hostigamientos, así como que se investiguen los hechos que dieron lugar a las medidas cautelares.
La Comisión hizo un llamado al Estado mexicano de investigar con la debida diligencia y a sancionar a los responsables intelectuales y materiales. En particular, debe incorporar un enfoque que tome en consideración el trabajo como defensor de derechos humanos del padre Marcelo, así como las amenazas y hostigamientos recibidos previo a su asesinato.