La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) consideró que la iniciativa por la cual se pretende imponer precios máximos a alimentos puede crear mercados negros, generar desabasto y desincentivar la competencia, entre otras cosas.
Preocupa que la iniciativa en su artículo 34 establece que “es obligación de la Secretaría de Economía fijar precios máximos a los alimentos que por su importancia para la economía nacional o para asegurar el consumo popular así lo requieran”.
La Cofece afirmó que la Constitución prevé un mecanismo para controlar precios como medida excepcional, es decir, para evitar “intermediaciones innecesarias” o alza de precios.
Expuso que la lógica del mecanismo constitucional “debe entenderse como un mecanismo excepcional que, en todo caso, sería implementado cuando exista plena justificación económica o emergencia social”.
De no usarse así, “la regulación de precios sin debida justificación o racionalidad podría distorsionar el funcionamiento eficiente de los mercados”, reducir los incentivos a la innovación, generar escasez de incrementarse la demanda de bienes con precios controlados, generar mercados negros, desajuste a los aparatos para pesar los productos, entre otras cosas.