Enfrentar pandemia
Congreso de la Unión.- El gobierno federal asegura que estamos preparados para atender la pandemia del coronavirus Covid-19 que ha impactado negativamente en la economía global, provocando la caída en los índices de las principales bolsas de valores del mundo y que mantiene al peso en niveles históricos de depreciación llegando a las 23 unidades por dólar.
Sin embargo, no se puede ocultar que nuestro sistema de salud enfrenta rezagos ancestrales que ponen en tela de juicio la capacidad para responder a una contingencia como la que se prevé con la multiplicación de casos del nuevo coronavirus.
Según organismos como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el sistema de salud de México está fragmentado y tiene inequidades marcadas en el acceso y la calidad de sus servicios.
Fragmentación, presupuesto insuficiente y mal repartido, déficit de médicos y enfermeras, baja calidad de servicio, son evidencias de que nuestro país no ha logrado poner al día su sistema de salud pública, según un diagnóstico de la División de Salud de la OCDE.
La División tiene a su cargo la generación de información y datos que permiten comparar los sistemas de salud de los países integrantes de la OCDE, así como el análisis económico de las políticas sanitarias y la asesoría a quienes toman las decisiones y partes interesadas sobre cómo responder a las demandas de más y mejor cuidado de la salud.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), cerca del 60 por ciento de los usuarios de servicios públicos (IMSS, ISSSTE y el desaparecido Seguro Popular hoy Instituto para la Salud y el Bienestar) reporta deficiencias que contribuyen a que los beneficiarios tengan que pagar por un servicio de salud privado.
Actualmente, cerca del 30 por ciento de los mexicanos afiliados a un esquema de seguridad pública opta por servicios particulares de medicina.
Así, tenemos que en estos momentos de pandemia del Covid-19, en hospitales particulares como el ABC y Ángeles de la Ciudad de México, los costos de las pruebas para detectar el nuevo virus van desde los seis mil hasta 10 mil pesos, un precio bastante elevado para un gran sector de la población.
Las autoridades del sector salud estiman que la pandemia del coronavirus durará por lo menos tres meses, lo que nos da una idea del esfuerzo conjunto que debemos hacer los mexicanos para salir delante de la adversidad sanitaria que tiene al país al borde de la parálisis y el aislamiento social.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo un llamado al gobierno de México: la respuesta a la pandemia de Covid-19 debe ser coordinada desde el más alto nivel de gobierno y no relegada exclusivamente al sector salud.
Debe haber un compromiso político al más alto nivel porque esta pandemia no afecta solamente al sector salud, sino que ataca todos los sectores del gobierno, dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
Destacó que el liderazgo del Presidente es esencial, sobre todo para movilizar a la sociedad y subrayó que “la respuesta debe ser un asunto de todos, todos los mexicanos deben unirse, concierne a todos”.
“Esperamos ver progresos en el enfoque del gobierno y de la sociedad. Eso es lo que va a detener este virus”, agregó.
Tedros alertó que las medidas de distanciamiento social que están poniendo en marcha los países no lograrán frenar la pandemia de coronavirus si no se llevan a cabo más pruebas de detección.
“No hemos visto una escalada urgente en las pruebas, aislamiento y rastreo de contactos, que es la columna vertebral de la respuesta al coronavirus. No puedes combatir un incendio a ciegas. No podemos frenar esta pandemia si no sabemos a quién está infectando. Nuestro consejo a los países es sencillo: pruebas, pruebas, pruebas“, enfatizó.
En otras recomendaciones para México dijo que se deben preparar los sistemas de respuesta de emergencia; aumentar la capacidad para detectar y atender pacientes; asegurar que los hospitales tengan el espacio, los suministros y el personal necesario, así como asegurar la cantidad de respiradores mecánicos.
A nivel estatal, la presente administración está haciendo lo que le corresponde para enfrentar la pandemia. El gobernador Rutilio Escandón Cadenas informó que el Centro de Convenciones Chiapas y Polyforum Mesoamericano en Tuxtla Gutiérrez, se encuentra en avance para su transformación en un hospital improvisado que atienda casos de Covid-19.
El mandatario detalló que en caso de avanzar a una fase 2 o 3 de la contingencia por la pandemia del nuevo coronavirus en Chiapas, los salones del Polyforum Mesoamericano se utilizarán para los pacientes detectados y que se encuentren bajo observación.
Dijo que solamente esperan la autorización de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), para acondicionar el lugar con lo necesario para la atención médica de dichos casos.
Escandón Cadenas añadió que se encuentran en un proceso para acomodar y adaptar los salones del Polyforum Mesoamericano, ya que dicho inmueble cumple con ciertos criterios para ser modificado.
“Los salones son bastante grandes, abriríamos en un inicio una parte, estamos en el proceso de que se autorice por la Cofepris. En Tuxtla Gutiérrez, este espacio es grande, limpio y se encuentra cerca de la zona hospitalaria ante cualquier urgencia o cuando se suba a una segunda o tercera fase. Además, en otros municipios ya tenemos previstos espacios para atender cualquier enfermo grave o muy grave”, explicó Escandón Cadenas.
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