Priistas de la 4T

Buenos días, Chiapas. . .Como costal de box traen los “voluntariosos” a don Aquiles Espinosa García en las redes sociales y en medios locales de comunicación, cuyo único delito es haber militado en el Partido Revolucionario Institucional (PRI), pero dígame usted, estimado lector, ¿quién de los morenistas no ha militado en el PRI?

La inmensa mayoría de los ahora integrantes del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) pasaron por las filas del extricolor. Priistas de la Cuarta Transformación les llamo yo. Desde el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, hasta el afanador del edificio de Morena en la Ciudad de México, pasaron por el partido fundado por Plutarco Elías Calles.

Incluso hasta el hoy suertudo jefe de Gobierno de la CDMX, Martí Batres Guadarrama, hacía la Gaceta Informativa en una delegación de la Ciudad de México en administraciones priistas, ahora pretende aparecer como “auténtico” de izquierda. Sin embargo, no se debe olvidar que el pueblo no tiene memoria, porque Manuel Bartlett Díaz era el secretario de Gobernación cuando se le cayó el sistema y le robaron la elección presidencial a otro expriista, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, en 1988. Yo le pregunto a usted: ¿Dónde está ahora haciendo negocios junto con su hijo, Manuel Bartlett?

Aquí permítame hacer un paréntesis, antes de que se me olvide, porque la memoria ya no es la misma de la juventud. En la Cámara de Diputados de la CDMX, los diputados de oposición a Morena no permitieron la reelección de la procuradora Ernestina Godoy, quedando como encargado el vocero que de manera exprés obtuvo el título de Licenciado en Derecho, Ulises Lara, quien a la vez es excuñado de Martí Batres Guadarrama y tiene un hijo con la hoy ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Lenia Batres Guadarrama. Todo queda en familia.

Pero volviendo al tema principal, Aquiles Espinosa García no es el único que cambia de partido, lo han hecho ya varios ex dirigentes estatales y cuadros distinguidos del PRI, quizá buscando mejorar su participación en la política local y sabedores que Alejandro Moreno Cárdenas, Willy Ochoa Gallegos, Rubén Antonio Zuarth Esquinca y demás familiares están sepultando lo poco que todavía queda del extricolor en Chiapas.

Le critican al oriundo de Jiquipilas el hecho de que no haya publicado su renuncia a la militancia del PRI, en caso de que lo hubiera realizado. Pero en caso contrario, los estatutos priistas son muy claros y no es necesaria la renuncia por escrito para considerarse o considerarlo fuera del instituto político.

Incluso la oposición política se da en tiempos electorales, pero pasadas estas es válido que un gobernador pueda invitar a formar parte de su gabinete a políticos de los diversos colores y militancia, pero en Chiapas eso no se perdona por revanchismo, por envidia o por el dichoso “fuego amigo”.

El giro de 360 grados que dio el proceso interno de Morena a la gubernatura provocó que las piezas de ajedrez también se movieran puesto que el alcalde Carlos Morales, quien participó en el proceso interno gubernamental con resultado negativo y que tampoco fue tomado en cuenta para el Senado, dignamente no aceptó una candidatura a diputación federal.

Carlos Morales mejor decidió terminar sus seis años alcalde de Tuxtla, cuyos resultados positivos están a la vista. Hay avances que no se lograron en los pasados 20 años de administración capitalina, puesto que la mayoría de los alcaldes ni siquiera vivían en Tuxtla, poco les importaba su desarrollo y utilizaron el puesto como trampolín político y económico para regresar a la CDMX.

Por lo mismo apareció en escena Aquiles Espinosa, quien conoce perfectamente desde hace muchos años a Carlos Morales Vázquez, sabe que puede darle continuidad a lo realizado en estos seis años, mejorar en otros casos y perfeccionar lo que pudiera quedar a medias al término del presente trienio.

El actual alcalde ha trabajado por Tuxtla, razón por la que cuenta con el respaldo de la mayoría de los tuxtlecos y estos sabedores de la línea que trae Aquiles Espinosa García, también le han brindado el respaldo en cada una de las visitas que realiza a las diversas colonias y ejidos de la capital política de Chiapas. Respaldo que han podido detectar las diversas casas encuestadoras que le dan puntos rumbo a la determinación de quién será el coordinador municipal en la “conejera”.

De ahí podría provenir la andanada de golpes bajos en contra de Aquiles, hasta Willy Ochoa se presta para ello. Sin embargo, en el caso de Ángel Carlos Torres Culebro no consideramos que sea línea suya golpear a su principal competidor hacia el proceso interno morenista, más bien podría tratarse de voluntariosos que quieren quedar bien con él o que les deba el favor para, llegado el momento, puedan cobrárselo hasta con intereses.

No cabe dudas, la candidatura de Morena a la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez está entre Aquiles Espinosa García y Ángel Carlos Torres Culebro, más cuando el PVEM y el PT están trabajando para ir juntos a la elección municipal en la capital que les permitiría fortaleza para ganar con cualquiera de los dos; Paco Rojas o Bayardo Robles pocas posibilidades tendrían de ganarles en caso de que alguno fuera por el PRIAN-PRD.

Mientras tanto, Aquiles Espinosa y Ángel Torres continúan con su labor proselitista rumbo a la definición de Morena-PT-PVEM para saber con quién de los dos hará frente a la elección municipal de la joya de la corona política de Chiapas. Eso es lo importante y lo deben entender los simpatizantes de ambos, porque los golpes bajos en nada ayudan a la unidad que se requiere entre los morenistas para evitar fracturas lamentables.

Nos vemos y escuchamos por TVO Cuarto Poder de lunes a viernes de 8:00 a 9:00 de la mañana por www.cuartopoder.mx.

La pregunta del día

¿Por qué en lugar de criticar, Willy Ochoa Gallegos no se avienta al ruedo municipal?