Senasica y el ganado

Regular el ingreso de ganado procedente de Centroamérica parece ilusorio; las autoridades se engañan solas y si bien han firmado un convenio entre la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) y el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga) de Guatemala, ello no significa que vaya a pararse el contrabando que cruza a diario y por miles de reses, sobre todo por la zona selvática.

El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) ha informado que ya opera un esquema de trazabilidad que da seguimiento a los animales desde su ingreso a territorio nacional hasta su sacrificio, pero imagínense, se ha autorizado el ingreso de un primer embarque de 70 unidades pecuarias –panzonas- que pasarán de Guatemala a México por el puente internacional Suchiate II y las llevarán a ranchos cuarentenarios ubicados en los municipios de Ocosingo y Benemérito de las Américas.

Queda claro que los funcionarios de la Sader y de Senasica no conocen la frontera sur y están tomando las medidas desde las rodillas; quizá quien decidió realizar ese procedimiento solamente agarró un mapa y midió en centímetros, cuando la realidad es que de Ciudad Hidalgo a esos dos municipios selváticos los separan cientos de kilómetros, por tanto nos preguntamos ¿No sería más fácil instalar los centros de acopio y cuarentenarios en los municipios de Suchiate, Tuxtla Chico o Tapachula?

Dicen que quieren combatir el contrabando de ganado procedente de Guatemala. Los comunicados oficiales que se han dado a conocer por parte de las dependencias del ramo federal no han establecido el número de cabezas que ingresarán en esta primera etapa con las 70 unidades ganaderas, pero se sabe por ellas mismas que por la zona de Benemérito de las Américas cruzan anualmente un millón de animales en forma irregular, por tanto es un gran negocio para los inspectores sanitarios, corporaciones policiacas y diversas autoridades.

En su comunicado B080 del 2 de marzo, emitido por la Sader afirma que “el Gobierno de México está listo para recibir embarques de ganado bovino certificado procedente de Guatemala, de acuerdo con los requisitos establecidos en el Memorándum de Entendimiento firmado por los titulares de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y el Ministerio de Agricultura Ganadería y Alimentación de ese país. El ganado centroamericano provendrá avalado por el MAGA como libre de tuberculosis y brucelosis, aunque irán a ranchos cuarentenarios en los que permanecerán durante 21 días bajo resguardo, con la finalidad de que los técnicos constaten que las reses cumplen con los requisitos sanitarios que exige México”.

Dice que personal del Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA) certificará los controles sanitarios con la finalidad de disminuir el riesgo de que entren a nuestro país enfermedades de importancia cuarentenaria y para ello serán identificados con el arete azul centroamericano que cuenta con tecnología para georreferenciar el ganado que ingresa a México; además que el Senasica cuenta con Puntos de Verificación e Inspección Federales (PVIF) en donde se constata que se cumpla con la normatividad en la movilización de ganado y otros productos de origen animal y vegetal.

A su vez, en su comunicado B084, afirman que el Senasica invitó a los importadores de ganado procedente de Guatemala a sumarse a la estrategia que garantiza que a México sólo ingresen animales que cumplan con los requisitos de sanidad –necesarios para proteger la salud pública y salvaguardar la ganadería nacional-, lo que da a entender que no habían hablado con ellos sobre ese programa.

Les reconocen los derechos adquiridos por los acopiadores de ganado bovino de la frontera sur mexicana, cuando incumplen con todas las normas, en virtud a que el ganado que ingresan al país lo hacen en forma irregular, de contrabando y son cientos de miles de cabezas anuales, pero de acuerdo con la autoridad que ahora los quiere controlar generan empleos que benefician a más de 40 mil familias de los municipios de Chiapas: Benemérito de las Américas, Ocosingo, Palenque y Marqués de Comillas.

De tal manera que el propio director del Senasica, Francisco Javier Trujillo Arriaga, está reconociendo que el contrabando de ganado es una de las principales fuentes de ingresos para los habitantes de la región selvática y del norte de Chiapas que hasta ahora empiezan a tratar de controlar y que los acopiadores se encuentran dispuestos a colaborar con el nuevo esquema a fin de consolidar la importación legal de ganado libre de tuberculosis, brucelosis y garrapata.

Lo anterior deja entrever dos cosas, que el ganado que está ingresando en forma irregular o de contrabando pone en riesgo la sanidad de todo el sector nacional y segundo, los funcionarios de la Sader y Senasica no tienen ni la menor idea de cómo evitar que siga esa actividad, porque la frontera sur no tiene controles, hay cientos de pasos informales y querer que los contrabandistas que operan en la selva vayan hasta Ciudad Hidalgo a cruzar legalmente el ganado es una utopía, porque después de legalizar su entrada a México tendrán que llevarlo a cientos de kilómetros hasta Ocosingo y Benemérito de las Américas, lo que representa cientos de kilómetros y gastos millonarios, aparte claro del pago de impuestos ante el SAT que ahora  evitan.

 A escena

Todo parece indicar que el secretario General de Gobierno, Ismael Brito Mazariegos, ya sabe de la incapacidad de su delegado en Tapachula, Omar Ornelas Silva y tuvo que ser él personalmente quien fuera a atender los problemas a las comunidades Pavencul y Toquián Grande, en donde desde hace meses se viven conflictos relacionados con el transporte y que en los últimos días de enero pasado derivaron en manifestaciones y enfrentamientos. Brito Mazariegos escuchó a los dirigentes de esas comunidades y les dijo que su presencia era para dejar clara la cercanía del gobierno de Rutilio Escandón Cadenas y se comprometió a tener una comunicación más estrecha con ellos. En Toquián Grande incluso fue reabierta la oficina del Registro Civil… Hasta la próxima.